jueves, 18 de abril de 2013

¡Todo, todo y todo!

¡No quiero más! ¿me perdonas un poco?

¿quién no ha pronunciado esto alguna vez en su vida? y la respuesta siempre era: ¡Te lo comes, hay muchos niños que se mueren de hambre!

El menú siempre es un reto. En el cole suele estar "mala" la comida y en casa se recurre muchas veces a lo rápido, práctico y seguro (pasta, pizza, McDonalds, un vaso de leche...); pero los tiempos están cambiando.


La dieta Mediterránea, las 5 comidas diarias, la pirámide alimenticia está ganando terreno. 


¿Cómo hacer para que coman?
- Raciones razonables. Pensemos en el tamaño del estómago de los niños. Mejor poco y que repitan.
- Desayuno + media mañana + comida + merienda + cena.
- Olvidar la tele, los juguetes, los Ipads y todo lo demás a la hora de comer. 
- Procurar comer y/o cenar todos juntos. Compartir ese momento para charlar y para enseñar a los niños los hábitos en la mesa (higiene, postura, masticado, poner y retirar la mesa; pero también conversación, valores, familia...).
- Llamar a cada alimento por su nombre.
- Respetar la pirámide de alimentos.
- Temporalizar las comidas. A un niño que en 20-30 minutos no ha acabado hay que retirarle el plato y NO ofrecerle nada más hasta la siguiente comida.
- Con la insistencia llega la preferencia. Hay comidas más "buenas" que otras para un niño; pero como hay que comer de todo es mejor acostumbrarlo. Poner un poco de lechuga acompañando el segundo plato o de aquellas verduras que cuestan más; permitir el tomate para acompañar el pescado que no apetece; ofrecer primero un poco de fruta y después el yogur... Hay que echarle imaginación pero, lo que hay en el plato, se come.
- Cocinar con los niños les permite experimentar y ver el fruto de su trabajo cuando se sientan en la mesa. El esfuerzo les abre el apetito.
- Imprescindible desayunar en casa y sentado en la mesa. El desayuno ideal: leche + cereales (tostadas, pan cereales, galletas, bocadillo) + fruta.
- Procurar que mastiquen evitando triturar la furta, deshacer las galletas, etc.; ya que no hacerlo tiene repercusiones negativas en el desarrollo del habla.
- Mejor lo casero que lo de súpermercado.

Lo que pretendemos evitar es esto:



¡A comer!

5 comentarios:

  1. Si, la verdad es que es un momento crítico dei dia, donde la paciencia juega un papel muy importante. Si nosotros perdemos la paciencia, el niño gana, y consigue lo que quiere, el enfrentamiento.
    El capítulo de la supernanny muestra perfectamente donde nunca tenemos que llegar y lo que tenemos que hacer si queremos conseguir que sea un momento positivo del dia., siendo conscientes que no es nada fácil.

    Felicidades por el blogg Ana!! Gran recomendación! :)

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  2. Las prisas no son buenas... Hay que tomar aire y convertir el momento de comer en un momento a compartir. Nunca usarlo como amenaza, ni como premio (Cómo no recojas, no cenas! // si comes bien te doy un helado...NOOO). Es difícil, lo sé.

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  3. El momento de la comida es importante, tanto en casa como en el colegio. En el colegio debe haber un clima relajado, el adulto debe ser paciente y respetar el ritmo de cada niño. Los niños deben de probarlo todo y aprender a comer de todo. También es cierto q en el colegio es más fácil q coman verduras, legumbres, pescados... q en casa cuestan más...
    Felicidades Ana!bss
    Bego

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  4. El momento de la comida es un hábito muy importante en el colegio y en casa. Los niños aprenden a comer sólos y a comer de todo. El adulto debe ser paciente y respetar el ritmo de cada niño, ya q los adultos también comemos a ritmos diferentes, e ir descubriendo q alimentos le gustan más y cuáles son los más difíciles de comer... Ánimo y a comer!

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  5. Totalmente de acuerdo. La autonomía en la mesa es una guerra que se gana con paciencia y después de lidiar muchas batallas.

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